miércoles, 12 de enero de 2011

La noche que nació el Mucho Betis


Hay momentos en esta vida que son inolvidables, y entre los vividos en nuestra pasión balompédica guardamos con especial emoción el de aquella fría noche de febrero de 1994 en que tras eliminar al Barcelona del Dream Team, la fiel infantería verdiblanca, se echó a la calle a celebrar aquel triunfo que sabía a gloria tras tanto tiempo de pesares.
Aquella noche, se nos olvidaron las tres largas temporadas que llevábamos penando por aquellos campos de segunda, igual que ahora, pero con la diferencia de que mientras ahora estamos lideres y el objetivo se ve cada día más cerca, por entonces, estábamos no sólo lejos de conseguir una plaza de ascenso sino tan siquiera de acercarnos a una plaza que permitiera jugar la promoción.
Aquella noche fría de febrero en la Plaza Nueva empezó a nacer un grito, el Mucho Betis,  que venía a sustituir a aquel manque pierda que se forjó en los momentos más duros del beticismo. 
Curiosamente aquel Betis fue, como siempre, capaz de la gesta ante el grande y de sucumbir ante el rival fácil, pues tras ganar en el Nou Camp, perdería días más tarde contra un equipo llamado Villarreal que no era ni mucho menos lo que hoy ha llegado a ser, lo que  terminaría provocando que llegara al banquillo un hombre fundamental en la historia moderna del equipo de las trece barras, Lorenzo Serra Ferrer, quien apenas unos meses más tarde no sólo conseguiría devolver al Betis a la Primera División, en aquel glorioso triunfo de Burgos, sino que lo llevaría a vivir las páginas más gloriosas de nuestra historia moderna.
Pero antes que llegara todo aquello, fue aquella noche fría de febrero del noventa y cuatro, en que aquel Betis, de segunda, perita en dulce apetecida por los grandes para pasar unos cuartos de final, hizo sucumbir al Barcelona de Cruiff , equipo que por entonces no sólo maravillaba en la liga española sino también a Europa y con ella al mundo entero, gracias a aquel gol de Juanito.
Aquella noche en la Plaza Nueva volvieron a ondear las banderas verdiblancas de nuestros sueños e incluso San fernando en su estatua terminó abrigado con una bufanda con los colores del Betis, mientras algunos votaban sobre el escudo de chinos de la plaza, y es que como titulaba la portada del ABC del día siguiente, Así es el Betis.

1 comentario:

Zapateiro dijo...

¡Viva el Betis manquepierda!