En la calor de la madrugada, sólo se escuchaban los claxones de los coches y los gritos de quienes cruzaban las avenidas en esta calurosa noche de verano.
En Sevilla el termómetro impedía dormir, y en Viena había caido la mundial, con descarga eléctrica incluida.
España, vestida de gualda, pasó por encima de Rusia literalmente, ahora ya sólo nos queda soñar con la final, España ilusiona, y no sólo en casa que sólo hay que echar un vistazo a la prensa en internet, para ver los titulares de los periódicos extranjeros.
España puede y debe, y alí estaremos todos, más que le pese a aquellos como a Josu Erkoreka que resentidos y rumiantes iban con Rusia...
Veinticuatro años después, vuelve España a una final, para seguir haciendo historia, y ganarla como hace cuarenta y cuatro, esa que nos cuentan pero que no vivimos, de momento ya tocamos la gloria con las yemas de los dedos, ahora sólo queda hacerla nuestra.
2 comentarios:
¡Al cielo con ella!
Ayyyyyyyyyyyyyyyyyyy, que me gusta ganar la porra del bar acertando una final España-Alemania, Que viva Españaaaaaaaa!!!!!!
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