miércoles, 22 de julio de 2009

Un paseo por la Velá


Triana reluce en la gracia de las vendedora de las avellanas verdes, en las macetas de pilistras de los patios de las casas y en aquellas otras de albahaca que espantan mosquitos y dan belleza verde a las ventanas.
Hemos cruzado por Callao, San Jorge y el Altozano, para admirar el alumbrado que en estas noches de los días señalaitos iluminan el cielo de nuestro barrio, mañána nos acercaremos a la cucaña, pero antes, he vuelto, como entonces, te acuerdas, a tomarte por el talle y a cruzar por el puente con sus farolillos y sus banderitas gitanas para asomarnos al espejo del río y ver la luna reflejada y con la mareita que sube de Barrameda robarte ese beso que entre suspiros me negabas en otras calles solitarias.
De pronto, una voz nos ofrece jazmines, jazmines en moña, y tu belleza morena se realza con esa joya caduca que en horas estará marchita, nos adentramos por Betis, olor a sardinas y a cervezas heladas, la Velá de nuestro barrio nos aguarda, para vivirla como ayer, disfrutarla como hoy y soñarla como siempre.

1 comentario:

Ignacio SM dijo...

Yo nací en la calle Resolana, pero todos los años voy una noche a la Velá, es como una tradición, una de las pocas cosas que me queda por hacer antes de irme de vacaciones.
Un saludo